Joche Meza, el talentoso músico y compositor, rinde un emotivo homenaje a su padre, Lizandro Meza, quien se destacó como uno de los grandes exponentes de la música sabanera, particularmente en la cumbia, vallenato, paseo, porro y música tropical, un género que ha marcado a generaciones con su autenticidad y su sabor único. A través de su trabajo musical, Joche busca mantener vivo el legado de Lizandro, quien con su acordeón y su estilo propio se convirtió en una leyenda de la música sabanera.

En este tributo, Joche fusiona las influencias de la música sabanera que su padre popularizó, manteniendo la esencia de los ritmos y melodías tradicionales que marcaron la historia de este genero. Con cada acorde, Joche busca transmitir la riqueza de las composiciones que su padre dejó como legado, sin dejar de lado su personal que se caracteriza por un enfoque moderno, pero respetuoso de las raíces musicales. El homenaje no solo destaca la labor artística de Lizandro Meza, sino también el impacto cultural que tuvo en la región Caribe colombiana, especialmente en la zona de la sabana. Su música, llena de historias y sentimientos, fue un vehículo para expresar las vivencias de un pueblo y se convirtió en la banda sonora de innumerables momentos de la vida cotidiana.

Con este trabajo, Joche Meza no solo celebra la memoria de su padre, sino que también asegura que la música sabanera, esa que llegó a tantas personas gracias a Lizandro, sigue sonando con fuerza en el corazón de nuevos públicos. Un tributo que no solo preserva el pasado, sino que también lleva el legado de la música sabanera hacia el futuro, manteniendo viva la llama de una tradición invaluable.